‘No soy Maduro ni Trump’, señala López Obrador
- El dirigente también dedicó tiempo al final de su discurso para abordar, el diferendo con Ricardo Monreal.
Ciudad de México.- Andrés Manuel López Obrador aseguró ayer que así como en las elecciones de 2006 y 2012, PAN y PRD pactaron ‘‘apoyar de facto’’ al candidato con más posibilidades de ganar, en 2018 ‘‘van con la misma estrategia, pero aunque se junten y a pesar de la guerra sucia Morena ganará’’ la Presidencia y convocará ‘‘a acordar la paz y parar la irracional violencia’’ en el país.
‘‘Quieren espantar y meter miedo. Es una desgracia escuchar a (Enrique) Peña decir que si Morena gana, México será como Venezuela. Me da pena ajena. Es un vulgar calumniador, no tiene ninguna prueba de lo que insinúa. No soy (Nicolás) Maduro ni (Donald) Trump. El próximo comandante supremo de las fuerzas armadas no dará la orden de masacres o que se reprima al pueblo’’, expuso.
Ayer, en el Monumento a la Revolución, en el contexto de la firma del Acuerdo de Unidad por la Prosperidad del Pueblo y el Renacimiento de México, el dirigente de Morena también dedicó tiempo al final de su discurso de 40 minutos para abordar, sin mencionarlo, el diferendo con Ricardo Monreal, quien no se presentó al acto.
Cuatro días después de que el delegado de Cuauhtémoc desconoció la encuesta del partido, que favoreció a Claudia Sheinbaum, y pidió una nueva encuesta para elegir al candidato a jefe de Gobierno de Ciudad de México, López Obrador sostuvo que el movimiento ‘‘es para la transformación de México, ese es el objetivo superior’’, y ‘‘no los cargos, el ‘quítate tú para que me ponga yo’, no es la ambición’’.
Porque, añadió, ‘‘se confunden las cosas y se piensa que lo más importante son los cargos y brota la ambición y la calentura, sobre todo si se va a ser candidato’’ a algún puesto.
Ejemplificó que si la candidatura es para diputado o senador plurinominal, ‘‘se alborota más la gente. Eso no sirve, en estos tiempos ya no. Los cargos son un medio, no un fin’’.
Durante los últimos seis minutos de su mensaje dijo que los dirigentes de Morena no pueden dejar pasar la oportunidad de dirigir un movimiento de transformación. ‘‘Esto es la historia, hay que hacer historia, no ocupar un cargo. Si se triunfa habrá muchas oportunidades. No todo son candidaturas’’.
Enseguida preguntó: ‘‘¿Qué, si se gana, no va a haber un director de Petróleos Mexicanos? ¿Un director de la Comisión Federal de Electricidad? ¿Un secretario de Educación? ¿Un responsable de garantizar la salud del pueblo? ¿O es que sólo son los cargos, ser diputado o senador u otro?’’
Lo relevante, agregó, es lograr la transformación del país y la herencia que se dejará a hijos y nietos. ‘‘Decirles: ‘dominaba una mafia del poder, hasta que nos organizamos y movilizamos y el 1º de julio de 2018 comenzó la transformación de México’. Eso es lo más importante’’.
Luego preguntó a las miles de personas que se congregaron en la plaza, algunas decenas incluso desde el observatorio del Monumento: ‘‘¿O ustedes están aquí porque quieren cargo?’’ La respuesta fue: ‘‘¡Nooooooo!’’ y López Obrador completó: ‘‘Porque quieren un cambio de verdad. Luchamos por la nación’’.
Consideró que a 10 meses de las elecciones, Morena está ‘‘en condiciones inmejorables’’ para ganar la Presidencia de la república, “porque la gente está harta de la corrupción y del engaño’’.
Sostuvo que PRI y PAN ‘‘han engañado durante años con la llamada ‘alternancia’, haciendo creer que son distintos, cuando están al servicio de la mafia y si a ésta se le cae un partido, levantan a otro. ¿O hay diferencia entre (Carlos) Salinas, el jefe de la mafia, y (Vicente) Fox, formalmente militantes de PRI y PAN? ¿O entre Peña y (Felipe) Calderón?’’
Ambos partidos, indicó, buscan reditar la misma estrategia de las dos elecciones presidenciales recientes. ‘‘Van a palomear a sus candidatos para ver cuál de los dos levanta y antes de las elecciones harán a un lado al que se quede atrás, como con Roberto Madrazo en 2006 y (Josefina) Vázquez Mota en 2012’’.
Alertó que la nueva guerra sucia, de la que ofreció dar datos posteriormente, busca ‘‘meter miedo’’ de que Morena es antirreligioso, está contra los empresarios y las fuerzas armadas. Eso es falso. Respetamos las instituciones’’.
La Jornada.